martes, 27 de enero de 2009

polilla

Cada cierto tiempo pasan. Pueden ser siglos pueden ser minutos. Solo pasa, como el viento entre las orejas.

Las cosas se comienzan a desvanecer, la mala pintura se deshace con la primera lluvia primaveral, que parte al son de un pistolero, y el paisaje tan blanco, como miente al hablar de muerte. Todo es obscenamente blanco, listo para dibujar trazos de inocente vestido.

Todo es tratar con la mejor parte de cada uno, ya sé … que es un poco conflictiva y escurridiza, pero tan solo es agarrarla de las mechas.

Una polilla al fin se posó sobre la nariz, y de cerca se miran la polilla y tu, decididos a comenzar un duelo, 3 pasos al frente, 3 aleteos al frente. El pistolero carga las armas…1…2…3( ) ¡ . media vuelta y violenta, se dispara una oportunidad.